La gente no lo cuenta
El día que a Sandra le hicieron el legrado, la ginecóloga nos hizo un comentario que me llamó especialmente la atención: “Ya veréis como a partir de ahora os empezáis a enterar de muchísima gente que ha pasado por lo mismo”.
Para ser sincero no me lo creí. Supuse que era algo que le debía de contar a todas las parejas que se veían en esta situación. Pensé que ‘esto no es algo que se sufra en silencio… como las almorranas. Se trata de un aborto’.
Pero me equivocaba. Desde entonces nos hemos enterado de muchísimas personas que sufrieron abortos involuntarios. Mujeres que nunca nos hubiésemos imaginado que hubiesen tenido ninguna complicación se nos acercaban y le confesaban a Sandra que ellas también habían pasado por eso. Algunas de 8 semanas y otras de 3, o incluso 5 meses. Algunas incluso habían sufrido 4 y 5 abortos antes de conseguir tener un embarazo con éxito.
Por lo visto, la gente si que prefiere callar estas experiencias. Es como si al saberlo menos gente nos fuese a doler menos. Pero claro, una vez que entras a formar parte de ese club se sienten identificados y sienten la necesidad de reconfortarte haciéndote saber que no estas solo.
Seguramente se trata de una actitud más instintiva que tomada a conciencia, pero la comprendo. No es agradable que sientan lástima por uno, pero sí que es reconfortante saber que otros han estado así y han salido adelante.
7 comentarios :
Publicar un comentario